La Asociación Socio-Cultural Entre Mares ha vuelto a salir a la calle para seguir dando voz al drama de la inmigración y expresar su dolor y solidaridad con la familia de la última migrante muerta en el mar cuando trataba de alcanzar las costas canarias, a bordo de la embarcación que fue rescatada y trasladada a Puerto del Rosario el pasado martes.
Entre Mares también rescata del olvido a las 12 personas desaparecidas y 22 muertas, cuyos cuerpos flotaban en el mar frente a las costas griegas después de haber naufragado las embarcaciones en las que viajaban el pasado jueves 6 de octubre.
La asociación advierte de que en los últimos días han llegado a las costas de canarias más de 160 personas. Sin embargo, “lo único que se pone de relieve, desde el Ejecutivo canario y desde el Ministerio de Migraciones, es que las llegadas de inmigrantes han descendido respecto al pasado año”. Justificando un descenso que no es tal, critican, “ ya que a 15 de agosto de 2022, habían llegado un 25,8% más que en 2021, y del 15 de agosto al 30 de septiembre 2022 han llegado a Canarias 2.159 personas”, según los datos del Ministerio del Interior, subrayan. Todo ello “por el acuerdo que en marzo firmó el Ejecutivo español con Marruecos respecto del Sáhara”.
Entre Mares pone el foco, asimismo, en la “continua y mediática banalización” que está “deshumanizando a las personas, abriendo el camino de los discursos del odio-reproduciéndolos y generándolos”.
Se llega, incluso, a justificar la negativa de auxilio en el mar, la negativa a dar asilo, “las inversiones millonarias en tecnología militar con el Frontex a la cabeza y la normalización de la muerte por intentar buscar una vida mejor”.
Por eso, desde la entidad se exigen directrices comunes europeas en materia de inmigración con respeto a las convenciones y tratados internacionales en materia de derechos humanos. Y la aplicación del derecho de asilo y protección a las personas procedentes del continente africano tal y como se ha hecho con las procedentes de Ucrania.
Además se insta a la firma de convenios entre Unión Europea y los países de África para la exención de visados.
Y, por último, “el cese inmediato de los discursos alarmistas que generan miedos e incertidumbres en la población”. En este punto se exige rigor en la información que facilitan los medios de comunicación respecto a un fenómeno tan complejo como la inmigración para que muestren “la responsabilidad de las políticas migratorias en el drama humanitario al que día a día venimos asistiendo en Canarias”.
