Signorino exige al alcalde de Antigua que retire las competencias de Obras y Servicios a Cabrera por su “gestión nefasta”
La situación de aparente calma en el Ayuntamiento de Antigua estalla con las declaraciones del concejal de Comercio y Accesibilidad. Giuseppe Signorino acusa abiertamente al edil de Obras y Servicios, Juan Cabrera (AMF), de dinamitar su gestión, bloquear el montaje de la iluminación navideña y dirigir una campaña de desgaste contra él. “Se está librando una guerra sucia desde AMF hacia mi persona, capitaneada por el consejero de Obras y Servicios, Juan Cabrera”, denunció en una entrevista en el programa La Voz de Fuerteventura, en Radio Insular.
Según Signorino, todo comenzó con un bloqueo deliberado a la instalación de las luminarias navideñas. El acto de encendido tuvo lugar el domingo y el edil no quedó satisfecho, a pesar de la importante inversión realizada.
La corporación destinó 20.000 euros a la compra de material navideño y otros 60.000 al alquiler de luminarias para este período en el que, aseguró, "se produce el 30% de facturación de los comercios".
De hecho, de los 200.000 euros de partida presupuestaria con la que cuenta su Concejalía se han destinado estos 80.000 euros, casi 20.000 euros más que los derivados en el ejercicio anterior.
Trabajo planificado
El edil asegura que pidió apoyo logístico con meses de antelación. El 28 de julio, explica, remitió una carta oficial para solicitar herramienta, maquinaria y personal para el encendido navideño previsto para el 30 de noviembre. "Claramente, la respuesta ha sido la tranquilidad, entonces normalmente cuando la respuesta es tranquila, en el sentido que no te contestan, todo está marchando".
Con fecha de 13 de octubre, se marcó el inicio de los trabajos para llevar a cabo el montaje y "llegar con tiempo". La situación se tensó días después cuando una caseta utilizada para un evento anterior seguía ocupando la plaza principal, impidiendo colocar una de las piezas más importantes de la iluminación. Tras varios escritos formales, recalca, la caseta solo se retiró cuando intervino de forma directa el alcalde.
El encendido navideño que tuvo lugar finalmente el 30 de noviembre, con el objetivo de ser un escaparate para vecinos y visitantes, no logró el éxito buscado sino que se convirtió en fuente de críticas hacia el concejal del área, Giuseppe Signorino, que tuvo que improvisar para que el acto no quedara deslucido y que aún tiene "dos contenedores llenos de material… cuando debía estar la plaza totalmente a tope”. El encendido salió, "pero salió mal", lamentó.
“Gestión nefasta” y servicios bloqueados
Sus críticas fueron más allá y apuntaron a la gestión de las áreas que dirige el edil Juan Cabrera. Para Signorino el deterioro es evidente y la ciudadanía lo percibe cada día. “Tenemos una recogidita de basura que es totalmente nefasta, tenemos un mantenimiento inexistente, tenemos parques y jardines que ni lo cuento”
Ante este escenario, Signorino anunció que elevará una petición formal al alcalde, Matías Peña: “Esta semana produciré un escrito… pediré de manera oficial que le quita la delegación”. Propone que las competencias pasen al propio alcalde o a otro concejal, afirmando que no lo hace por interés personal, sino “para la gente del pueblo y para todo el municipio”.
Signorino sostiene que la gestión de Cabrera está generando un daño directo a la ciudadanía y perjudicando la imagen del ayuntamiento. “Estamos cansados de aguantar una persona que parece que no le interesa; la única cosa que le interesa es sillones”, afirmó.
Además, sostiene que el concejal utiliza los servicios municipales de forma discrecional y asevera que Cabrera "debe tener todo bajo su mano porque piensa que, haciendo favores a derecha e izquierda, la gente le va a dar el voto".
Con la advertencia ya sobre la mesa, la pelota queda ahora en el tejado del alcalde Matías Peña, que deberá decidir si respalda la petición de su concejal de Comercio o si mantiene sin cambios la estructura del gobierno municipal.
Entre tanto, Signorino asegura que no se va a callar: “Estoy aquí para decir todo lo que pasa”
Pese a la dureza de sus declaraciones, el concejal descarta una ruptura del gobierno municipal. Asegura que, aunque ha habido rumores de moción de censura, las matemáticas no cuadran, "se ha rumoreado muchísimo de una moción de censura… pero los números no les dan”, destacando el papel relevante del único concejal logrado por la formación CONTIGO en los números que maneja Matías Peña.
Balance de gestión: poco presupuesto e imposibilidad de optar a ayudas europeas
En su balance de gestión, Signorino reivindica que Comercio y Accesibilidad han sido áreas especialmente activas pese a la escasez presupuestaria.
Asegura que “basta mirar lo que se ha hecho desde el minuto uno hasta el día de hoy” para apreciar la diferencia con etapas anteriores y recuerda que trabaja con un presupuesto limitado. En Accesibilidad dispone de un presupuesto anual de 40.000 euros que ha destinado a la rampa de acceso a la Playa de El Castillo que mañana, miércoles, se recepcionará, "atendiendo a una demanda de los vecinos de hace muchos años".
En cuanto a sus proyectos culturales —como la creación de espacios de arte al estilo de Málaga o Milán— admite que no han tenido el éxito que esperaba. “Ha habido iniciativas, pero no vemos que realmente hayan redundado en lograr esa dinamización”. El concejal, recalcó, puede tener ideas innovadoras, potentes… pero con tan poco dinero no se puede más".
A pesar del escaso presupuesto, asevera sin complejos, "todo lo que estoy haciendo con 120.000 euros me está valiendo como un millón”.
Sobre la posibilidad de acceder a otras fuentes de financiación, como los fondos europeos, el edil reconoce que el Ayuntamiento está perdiendo oportunidades de financiación externa por no disponer aún del plan antifraude. Sin este plan aprobado, no hay fondos, reconoció. “El Ayuntamiento está sobrecargado de gestiones de emergencia, extremo poco personal y la cosa que se debe hacer no se hace”
