El Hotel Taimar, ubicado en Costa Calma, continúa cosechando éxitos por su firme apuesta por la accesibilidad.
Tras recibir un Premio Distinguido del Turismo de Fuerteventura, dos galardones de Caixa Bank y, el pasado mes de noviembre, el distintivo a la Mejor Responsabilidad Social Corporativa de España, otorgado por la Confederación Nacional de Empresarial, el Hotel Taimar ha comenzado año en Fitur firmando un compromiso por la accesibilidad con la Organización de Naciones Unidas. Un reconocimiento que compartió con el grupo internacional Quomi, cuyo presidente se desplazó de Japón exclusivamente para firmar el acuerdo.
Rubén Montesdeoca, copropietario del establecimiento hotelero majorero, mostró su satisfacción por suscribir “este compromiso con el código ético de la Organización Mundial de Turismo de Naciones Unidas”, en una entrevista en el programa La Voz de Fuerteventura, en Radio Insular.
Explicó que el equipo del Taimar presentó el proyecto de accesibilidad que desarrollan a la Fundación Essl, de Austria, el pasado mes de mayo, y que fue la propia fundación la que puso en conocimiento de la ONU la experiencia que se desarrolla en Fuerteventura, “porque se quedaron impresionados con que un hotel tan pequeño pudiera tener tanto implementado en accesibilidad”.
La ONU no solo ha rubricado el compromiso de accesibilidad con el hotel sino que lo ha invitado a la conferencia Zero Project que auspicia en Viena y a la que asisten unos 800 expertos. Una conferencia que versará sobre educación y en la que el Hotel Taimar será el único establecimiento hotelero de todo el mundo presente.
Montesdeoca se siente muy satisfecho de los logros alcanzados y del apoyo que está obteniendo de todas las instituciones y de la patronal majorera, Asofuer.
Ahora falta rentabilizar la actividad después de una inversión que ha superado los 10 millones de euros, con capital 100% canario, “el 95% majorero”, constató.
Han sido años difíciles, muy duros. Tras la reconversión, Taimar reinició la actividad en plena pandemia y tuvo que cerrar, durante unos meses, poco tiempo después.
Volvió a abrir y, desde entonces, ha seguido fiel a su hoja de ruta. Se eliminaron las barreras arquitectónicas, el 22% de las habitaciones son accesibles al igual que todo el espacio común. Además, se han ido implementando mejoras para personas con discapacidad auditiva y visual, y se continúa trabajando en mejorar la experiencia de los usuarios para que sean plenamente autónomos.
El firme compromiso con la accesibilidad y un proyecto socialmente responsable que genera simpatías y sinergias, han permitido ir sorteando las dificultades. También los galardones y reconocimientos ayudan, reconoce Montesdeoca, para ir logrando fidelizar clientela y mejorar la cuenta de resultados.
Sabe que en cuanto pueda demostrar la rentabilidad del hotel resultará más sencillo convertirse en referente para otros establecimientos y liderar el camino para que Fuerteventura sea un destino accesible, con el apoyo y complicidad necesaria de todas las corporaciones que deben actuar en el espacio público.
Montesdeoca destaca, una vez más, que el 16% de la población mundial tiene discapacidad o movilidad reducida y ni los establecimientos están preparados ni tampoco los destinos.
Ahora es el momento, insiste, es preciso captar todos los fondos que están llegando de Europa, “nunca ha habido tanto dinero, y lo debemos aprovechar para hacer de la Isla un destino para todas las personas”, concluyó.
