LVF:- Es uste una persona con amplia trayectoria en movimientos sociales de Canarias, ¿qué le lleva a dar el paso a la primera línea de la política de la mano de Reunir Canarias?
-Reunir Canarias es un punto de encuentro que parte de personas vinculadas a movimientos sociales. Llevamos muchos años trabajando por integrar propuestas que puedan significar cambios. En todo este tiempo, nos hemos dado cuenta de que nada cambia y que hay un muro que se llama institucionalidad. Así que hemos decidido reunirnos, que de eso sabemos nosotras. Somos las que no salimos en la foto pero nos hemos reunido con quienes salen en la foto. La gente está cansada de que no se hable de ellas. También cansadas de que se hable en los medios de comunicación y en los discursos de una Canarias muy diferente a la que vivimos nosotras.
LVF.-¿Es usted de la primera mujer trans candidata al Parlamento regional, teme que su condición sexual desdibuje su mensaje?
-Me alegra la pregunta, siempre se intenta encajar a las candidaturas que puedan ser distintas, como puede ser mi condición de mujer trans. Vivo en el Carrizal, levanto la persiana todos los días, pago las facturas, voy restando al salario y, a veces, llega el corte de luz antes que el salario. Es lo que me une, y nos une, al resto de Canarias y lo que nos hace diferentes a los que están tomando decisiones por nosotras.
LVF.-Han presentado su candidatura al Parlamento de Canarias. ¿Les ha dado tiempo a conformar planchas en el resto de Islas? ¿En Fuerteventura?
.-En Fuerteventura se está terminando de generar el equipo. En breve iremos anunciando los equipos que hay en cada Isla para que se vayan significando. Son personas que llevan trabajando desde hace tiempo y que trabajamos el proyecto antes que las nimiedades. Últimamente veo muchas noticias sobre gente discutiendo sobre candidaturas o la presidencia, pero la gente que llevamos la mascarilla en el bolsillo y la aplicación de la guagua en el móvil, no tenemos esos problemas. Nosotras tenemos otros problemas que estamos intentando resolver.
LVF.-¿En Fuerteventura, cuáles son los problemas en los que Reunir Canarias está poniendo el foco?
-El primer problema que tiene Fuerteventura es la ausencia de responsabilidad por parte de quienes dicen ser responsables. El segundo es que tratan Fuerteventura como el terreno donde pueden hacer lo que quieran con el territorio y con la gente que está sobre él. Infunden un miedo y la gente llega a un punto de no querer hablar y decirlo todo a través del silencio. Muchas veces, llegan al punto de descontentar tanto que es mejor no hablar para que no sepan lo que opino. Cuando el pueblo canario deja de opinar no es que haya dejado de opinar es que ha dejado de hablar. Y a Fuerteventura la han ninguneado, la han reventado a falta de inversión, de infraestructuras sociosanitarias, de recursos de proximidad y apoyo, de garantías en cuanto a diversificación económica sin cargarse los espacios naturales. Tratan a la población como si fuesen niños que no saben de qué están hablando y ellos se las saben todas.
LVF.-¿Por ejemplo?
El caso del Cabildo de Fuerteventura. Ni la ley contemplaba que 21 personas fueran a sustentar a dos, haciendo políticas caciquiles para gobernar todas las consejerías. Eso significa que el ego puede más que la representatividad de la responsabilidad. Y, también, que han ninguneado la gestión pensando que derechos sociales, políticas sociales, hacienda… todas las cuestiones importantes para Fuerteventura dejan de tener sentido. Si dos personas son capaces de hacer eso, ¿ las políticas caciquiles ahora están bien porque las hacemos nosotros? Así no funciona. Tan responsables son ellos dos, como el resto de los veintiún consejeros que están fuera. Están permitiendo esta locura. La gente ya no sabe ni qué es el Cabildo, ni qué es gestionar, no saben ni para qué les están pagando. Lo único que saben es que, por obligación, les tienen que pagar.
LVF.- ¿Qué perspectivas tienen a futuro? ¿No temen llegar a las corporaciones y encontrarse con el muro que denuncian y verse abocadas a la inacción?
-En el ejercicio de nuestra labor, nos hemos reunido con infinidad de cargos electos de distintas administraciones canarias. Siempre nos dicen: “las cosas desde fuera se ven muy bonitas pero desde dentro son más complicadas”. Claro que es complicado, nadie puede decir que es sencillo. Pero la realidad es que todo ya está inventado. Nosotras no vamos a dar ningún tipo de propuesta de la que no hayamos hablado o debatido hasta la saciedad. Se trata de que lo que pone el freno de mano son todos esos intereses que están exentos de la responsabilidad política. Están al margen de los círculos donde se toman decisiones y se dice que se hace por la gente en Canarias. El problema es que para poder llegar a las instituciones, hay que pedir favores, y los favores se pagan caros. El problema es que han decidido que tu representatividad puede comprarse y venderse, y que tu representatividad tiene un precio. El pueblo canario no tiene precio. Cuanto hablan de turismo, hablan de inversión. Cuando hablan de derechos sociales, hablan de gasto. Y eso es un síntoma de cómo piensan.
LVF.- Ha citado el turismo, el principal motor económico que se está `demonizando´, sobre todo por parte de algunos sectores de la izquierda. ¿Qué opinión tiene al respecto Reunir Canarias?
-Es innegable que Canarias ahora mismo tiene un motor económico principal que es el turismo. Eso es real. El problema no es el turismo, es el modelo turístico. Ahí está el debate. El problema es la ley del suelo, el problema es la ley de las aguas, el problema es todas las emisiones que no se tasan en la evaluación de emisiones del archipiélago y que superan, con creces, a los de muchos países europeos. El problema es que no se habla de ecotasa, y, cuando se habla, se habla de cómo evitarla. El problema es que se habla de fórmulas de turismo que se cargan la tierra y a la gente. Ya hemos superado el porcentaje de turismo previo al covid pero la desigualdad social, los datos de la EPA, y lo que vienen a ser los datos sobre pobreza estructural nos relatan que vamos a peor. Hay una falta de proporcionalidad entre lo que es el motor económico y a quién sirve. Hay que poner la economía al servicio de la mayoría y no al revés.
LVF.- Nos encontramos en Puerto del Rosario donde se evidencia la acción de la central de Unelco, en el Charco, emitiendo desde hace décadas gases que pueden resultar nocivos para la población, sobre todo en los días de calima. A pesar de las advertencias y de que los programas electorales durante años incluían el traslado de las infraestructuras a un lugar apartado del núcleo urbano…no se ha hecho nada…y ya ni siquiera se habla de ello.
-Para hablar de soberanía en Canarias, tenemos que hablar de un cambio en el sistema energético. Tenemos que hablar de autonomía energética, no vale con decir: vamos a implantar eólica y fotovoltaica. Está muy bien como campaña de marketing. La realidad es que tenemos un sistema económico y de mercado eléctrico, en el que nos anexionamos con un gobierno del Partido Popular que nos metió en ese sistema, que no contempla a Canarias, porque contempla el sistema eléctrico para territorios unificados. En Canarias tenemos que cambiar los motores de ciclo combinado que consumen fósiles a mansalva para poder reinvertir en energías limpias y renovables, porque tenemos recursos para eso. Pero hay que afrontar problemas estructurales. El problema es que no quieren hacer nada al respecto porque los favores apremian. La gente se cansa de escuchar promesas.
LVF.- Usted lleva muchos años trabajando en el ámbito de la dependencia y de las personas mayores. Un colectivo muy impactado por la pandemia que, por otro lado, ha evidenciado el maltrato que reciben nuestros mayores en muchas residencias. ¿Cuáles serían sus prioridades en este ámbito, si usted gobernara en la próxima legislatura?
-La primera es cumplir. Ya eso es una medida estructural. Cumplir con lo que se ha dicho. Ya no inventar nuevas propuestas, empecemos por algo tan lógico como cumplir con el Estatuto de Autonomía y con la Constitución. Cumplamos con los planes de infraestructuras sociosanitarias, hablemos de los modelos e inversiones en función de las Islas. Parece ser que Gran Canaria y Tenerife son las más importantes. Es necesario invertir en el resto. ¿Cómo es posible que en Fuerteventura no haya infraestructuras sociosanitarias o recursos de proximidad para atender a personas en situación de vulnerabilidad en su domicilio? Hay que invertir en un modelo de economía social, que permite generar empleo. Datos como el envejecimiento en Canarias en un 17,5% de envejecimiento, con población mayor de 65 años de edad y vamos a más. Hablemos de cambios que ajustados a las necesidades de la gente. No hay que hablar de cumplir los planes de infraestructuras sociosanitarias, ya hablar, se habló. Hay que cumplir. También con la ley de Dependencia. Las entidades sociales son muy importantes pero, entendamos, que el servicio público pertenece a la administración pública. La administración ha entendido, muy bien, que malpagar y malfinanciar los servicios públicos externalizándolos y privatizándolos conlleva a que ellos trabajen menos y, encima, les salga barato.
LVF:-No estamos en campaña todavía pero le pido un mensajes para la ciudadanía
Estamos en todas las islas, pueden conocernos y contactar con nosotras a través de distintos canales y redes sociales. Y como mensaje, les diría: voten la guagua que más cerca les queda de su casa.
