Análisis: Por qué los docentes de Canarias son los más estresados del país

Canarias encabeza el informe TALIS de la OCDE, que revela que los docentes del Archipiélago son los más estresados del Estado, principalmente por la indisciplina en las aula. Un diagnóstico “ajustado a la realidad”, según han reconocido Almudena Rodríguez, delegada de STEC, Jesús Morales en representación de ANPE y Pilar Azpeitia, de UGT Educación, en la tertulia de La Voz de Fuerteventura, en Radio Insular. 

Efectivamente los docentes se sienten identificados. El ruido, el bullicio y poder mantener la clase cada vez es más complicado”, afirmaba Almudena Rodríguez, delegada sindical del STEC. Aseguró que el problema es especialmente visible en Secundaria, donde “a veces tardamos en llegar de una clase a otra y cuesta restablecer el orden en el aula”.

Desde UGT Educación, Pilar Azpeitia explicaba que “el profesorado se considera a veces muy vulnerable ante conflictos entre profesorado y alumnado, incluso con insultos y desmotivación muy visibles”. La representante sindical destacó que este contexto “genera una sobrecarga de trabajo mental importante, tanto de reacción como de prevención”.

El informe, basado en datos de ocho comunidades autónomas, confirma lo que el sindicato ANPE lleva años advirtiendo, recordó Morales.  "El aumento de las situaciones conflictivas en las aulas y su repercusión en el estrés creciente entre el profesorado”,  es un hecho, advirtió.

Diversidad, desmotivación y falta de implicación familiar

La realidad del aula canaria es compleja. Azpeitia subrayó que “los entornos multiculturales y la diversidad de alumnado con diferentes ritmos de aprendizaje y necesidades especiales también implican estrés”. A ello se suma “la expectativa de las familias hacia el profesorado”, que, según dijo, añade presión y sensación de exigencia constante.

Rodríguez insistió en la importancia del acompañamiento familiar. “Nos preocupamos cuando vemos que hay familias que incluso a lo largo del curso nunca asisten a las reuniones". A mayor grado de implicación familiar, "mejor respuesta del alumnado”, coincidieron los docentes.  

El peso de la burocracia y la desconexión digital

El estrés docente no solo procede del aula. “He llegado a tener 275 alumnos y hacer miles de informes; eso no va incluido en las horas de clase. Es un trabajo que no se ve”, denunció Morales. Esa carga, añadía Azpeitia, “requiere estar delante del ordenador y hace casi imposible la desconexión digital”.

Según UGT, “un tercio de las bajas laborales se generan por estrés y por causas de salud mental”, derivadas del exceso de tareas administrativas y la presión normativa.

Ratios elevadas y condiciones físicas precarias

A pesar de un acuerdo plurianual para reducir el número de alumnos por aula, la situación sigue siendo difícil. “En tercero y cuarto de la ESO las ratios son de 30 alumnos, adolescentes a los que cuesta estar quietos”, explicaba Rodríguez, que también apuntó a la falta de ventilación y aire acondicionado como un factor que afecta al bienestar: “Hay aulas que prácticamente toda la jornada les da el sol”.

Cuidar al profesorado para cuidar la educación

Los sindicatos coinciden en que la situación requiere medidas urgentes para prevenir la fatiga emocional y el desgaste psicológico. “La docencia es una profesión muy bonita, pero también muy exigente. Tenemos que cuidar al profesorado, porque cuidar al profesorado es cuidar la educación”, concluyó Morales.